MANUAL DEL CAZADOR DE OVNIS: ASÍ ES UN ENTRENAMIENTO PARA CONVERTIRSE EN UFÓLOGO
Si le
fascinan las historias de extraterrestres, si está convencido de que hay vida
inteligente ahí afuera y que los platillos volantes no son un cuento chino,
entonces quizá le interese dar un paso al frente y convertirse en Investigador
de Campo en España para MUFON, la mayor y más respetada asociación civil de
ufólogos del mundo. Sólo necesita estudiar un manual, aprobar un examen tipo
test de 100 preguntas y hacerse con el equipo básico de rastreo alienígena. Una
vez conseguido todo eso, recibirá su carné oficial de investigador y podrá
comenzar a indagar todos los avistamientos de ovnis y los sucesos inexplicables
que ocurren en nuestro país. La única pega a este emocionante trabajo es que no
va a cobrar un solo céntimo.
Expertos en física, astronomía, electromagnética y matemáticas tienen el perfil ideal para añadir “ufólogo” a su currículo, una especialidad que cada vez despierta más interés entre los estadounidenses. Estudio de trayectorias, mediciones magnéticas y radiológicas, variaciones gravitacionales, geolocalización... De todo eso trata la labor del investigador de campo. Pero no se desanime, no hay que ser un experto en ciencias para formar parte del equipo. “Lo importante es tener interés por el mundo que nos rodea, ¿y cómo no va a haber alguien interesado en comprender que hay presencia alienígena en
Aceptamos
a la gente que ya posee conocimientos científicos y también a la que no, y a
todos les damos el Manual del Investigador de Campo, que ahora está sólo en
inglés pero que muy pronto vamos a traducir a varios idiomas. Una vez lo han
leído, y si siguen interesados, completan un examen, y el último paso es el
entrenamiento sobre el terreno. Nosotros ofrecemos varias opciones de
entrenamiento, y hay sesiones online para los que no pueden asistir”, cuenta
Modlin desde su pequeño rancho perdido en el desierto de Arizona.
Apenas
lleva unos minutos darse cuenta de que Modlin no es un visionario chiflado.
Posee un conocimiento asombroso del que se benefició la Marina de Estados Unidos
durante los 30 años en los que sirvió como uno de sus principales científicos.
Entre sus varios hitos figura el haber formado parte del equipo que desarrolló
la tecnología GPS.
“Durante
toda mi carrera, al juntarme con otros científicos, siempre salía la cuestión
de los ovnis. Y todos coincidíamos en lo mismo: es muy razonable pensar que hay
vida fuera de nuestro planeta y que de hecho nos han estado visitando desde
hace muchos años. Mira la
Tierra , cuánto ha evolucionado en tan poco tiempo. Hay 16
billones de planetas en el universo, ¿no es razonable pensar que otras culturas
han evolucionado en planetas que se formaron millones de años antes que la Tierra ? No tienen por qué
ser individuos como nosotros; tal vez allí los dinosaurios sobrevivieron, o los
insectos se volvieron inteligentes. Para mí es algo obvio”, asegura.
UN GRUPO DE PERSONAS BUSCAN OVNIS EN EL DESIERTO
Así es el entrenamiento de los
aspirantes
Asistimos al entrenamiento que
Modlin ofrece a tres aspirantes a entrar en su equipo de élite. Llevan ya años
investigando ovnis, y entre todos enumeran para El Confidencial los básicos que
cualquier persona en España que esté interesada en el tema necesita para
cumplir el sueño de convertirse en Mulder o Scully y asentir, con voz grave,
que “la verdad está ahí fuera”.
- Primer paso, formar parte de
una organización de ufólogos: MUFON es la más extendida, pero hay otras
opciones, como la estadounidense CUFOS o la británica BUFORA, que cuentan con
centenares de miembros cada una. En MUFON también se puede comprar el Manual
del Investigador de Campo sin ser miembro por 99 dólares, aunque los expertos
coinciden en que es básico tener un tutor durante la formación y disponer de un
comité de expertos para valorar cada caso.
- Smartphone: Es sorprendente la
cantidad de aplicaciones busca-ovnis que atesora nuestro teléfono inteligente.
“Puedes convertir tu teléfono en tu principal instrumento, ya no hace falta gastarse
500 dólares en este aparato y 500 más en el otro”, cuenta Modlin. Sus
aplicaciones de cabecera son JustGPS para geolocalización, Tesla Bot y Metal
Detector / EMF Meter como medidor de Gauss para campos magnéticos, y Theodolite
para tener brújula, inclinómetro y fotografías geolocalizadas.
- Contador Geiger-Muller: Una herramienta básica que no ofrece nuestro smartphone es un medidor de radioactividad. Los contadores Geiger detectan partículas y radiaciones ionizantes. Es un aparato muy importante, ya que en numerosos reportes de avistamiento de ovnis y alienígenas se asegura que los niveles de radiación del lugar se han mostrado inusualmente elevados. Algunos expertos sugieren que es consecuencia de los sistemas de propulsión; otros, del posible movimiento espacio-tiempo de los extraterrestres. Un contador Geiger-Muller puede oscilar entre los 100 y los 400 euros. Los expertos de MUFON suelen usar el Radiation Alert Inspector EXP y el SE Rad Alert.
- Magnetómetro profesional: Podemos usar la aplicación de nuestro teléfono, pero como dice Modlin, “cuanto mejor sea tu equipo más precisos y fiables serán tus resultados”. Los instrumentos del investigador jefe de MUFON son los siguientes: TriField Natural EM Meter y Ramsey TFM3 Tri-Field Meter (muy precisos y sensibles, diseñados para detectar campos eléctricos, magnéticos y de radiofrecuencia) y Magnii DSP-523 (lo mismo pero en formato digital).
También usa el sencillo visor de patrones magnéticos Arbor Scientific Magnetic Cube, muy común en las clases de ciencias del instituto. Según Modlin, el estudio de las oscilaciones magnéticas es clave en la búsqueda de alienígenas: “Para que un aparato venga de otra galaxia o de otra dimensión, debe saber manipular ciertos conceptos científicos. La electromagnética es uno de los conocimientos clave junto al control de la gravedad”, indica. Según el investigador jefe, los extraterrestres podrían tener la capacidad de moverse libremente mediante los campos electromagnéticos en una dimensión totalmente distinta a la nuestra.
- Visor de infrarrojos: Otra de las posibles capacidades de los alienígenas sería moverse por todo el espectro electromagnético que va desde los rayos infrarrojos hasta los ultravioleta, es decir mucho más allá del espectro visible que dominamos los humanos. Un visor de infrarrojos sería, pues, una herramienta indispensable en el kit del ufólogo.
- Conocimientos básicos de astronomía: “Es muy importante conocer la ubicación de las principales estrellas y planetas para saber qué luces se supone que deben estar ahí por la noche y cuáles no”, indica el investigador Russell Azbell. Lo mismo con las trayectorias de los objetos, asunto importante que requiere de ciertos conceptos matemáticos imprescindibles para valorar un avistamiento.
“Hay que ser tan abierto de mente
como riguroso”
- Buena técnica de entrevista: El
primer acercamiento a un caso es siempre entrevistar a la persona o personas
que han presenciado un fenómeno, generalmente el avistamiento de un objeto
extraño en el cielo o a veces una luz inexplicable. “Debemos contactarles en un
plazo de 72 horas. Una llamada de teléfono te permite saber si merece la pena
ir más allá o descartar el reporte. Cuando recibimos casos de lugares cercanos
a una base militar, o de ciudades que han celebrado por ejemplo un festival de
linternas chino, ya no indagamos más, pero cuando hay varias personas que han
visto lo mismo en el mismo instante es una señal de que es un caso serio”,
cuenta Azbell. “Otra gente miente, o dice ver cosas que no ha visto, Hay que
aprender a detectar esas situaciones”.
- Trabajar con ética y método
científico: “No queremos ciencia basura, sino ciencia basada en hechos y
pruebas”, insiste una y otra vez Chuck Modlin. “Hay que ser abierto de mente
pero a la vez riguroso, confiar en lo que indican tus estudios y no dejarse
llevar por las suposiciones o los prejuicios”, prosigue la investigadora Marie
Snow. Azbill advierte: “No hay que aproximarse a un caso con una idea fija,
porque a veces la investigación es totalmente distinta de lo que esperas.
Simplemente camina hacia donde las pruebas te lleven”.
- Tiempo libre y paciencia:
Azbell dedica unas 20 horas semanales a investigar los casos que le son
asignados. A veces incluso más. “Algunos casos pueden ser muy aburridos y pasar
semanas muy rutinarias. Yo trato de cerrarlos en una semana para que no se
acumulen”, advierte Snow.
- No tener miedo a que te llamen
‘friki’: “Varios de mis amigos piensan que estoy chalado. Para ser ufólogo
tienes que olvidarte de los comentarios de tu entorno. Por suerte, el montón de
programas que hay en la tele sobre ufología ayudan a que cada vez nos respeten
más”, reconoce Azbell. Su compañero David Harden le secunda: “Al principio
pensaban que me había vuelto loco, pero cuando les explico que lo único que
hago son investigaciones científicas, la gente hasta se muestra interesada y
quiere conocer todos los detalles de los casos en los que estoy trabajando”.
- Y por último, la suerte: “Sé
que algún día, antes o después, va a salir a la luz toda la verdad, y para eso
estoy trabajando”, dice Snow. Ella y los 550 investigadores de campo en activo
que MUFON tiene repartidos por todo el mundo. ¿Quién no soñaría con ser el
primero en descubrir que hay alienígenas ahí fuera?
FUENTE: WWW.ELCONFIDENCIAL.COM
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