lunes, 22 de mayo de 2023

¿DÓNDE ESTÁN? La paradoja de Fermi: por qué no hemos contactado con extraterrestres

Hay una clara contradicción entre la (aparente) evidencia de vida extraterrestre, estadísticamente hablando, y la imposibilidad de dar con ella


                                                               Fuente: iStock.

Publicado por Ada Nuño

30/01/2021



Que la verdad está ahí fuera ya lo sabíamos, solo hay que salir a buscarla. El problema es que quizá esté muy lejos. Aunque la aparición de vida en el planeta Tierra se produjo debido a una conjunción de fenómenos, y sabemos de sobra que no todos los planetas del Universo parecen preparados para albergar vida en ellos, teniendo en cuenta lo poco que conocemos y lo inconmesurable que es, hasta el punto de ser infinito, parece normal pensar que en algunos lugares de esta galaxia u otras podría haber vida extraterrestre. Hay 100 millones de billones de planetas parecidos al nuestro en el Universo. Pero, si es así, ¿cómo es que todavía no hemos podido contactar con nadie?

¿Se debe a nuestras limitaciones? ¿A que la lejanía es demasiada para poder contactar con otros, dada la tecnología actual? ¿A que no coincidimos en tiempo con otras civilizaciones? Pero, ¿Dónde está todo el mundo? Esas cuestiones ya se las preguntó en su día Enrico Fermi. Si estadísticamente hablando es probable que existan millones de civilizaciones extraterrestres, no parece tan normal no haber podido contactar con ellas. A esto se le llama la Paradoja de Fermi, la contradicción entre la (aparente) evidencia de vida extraterrestre y la imposibilidad de dar con ella.

¿Dónde está todo el mundo?

Al parecer, la paradoja surgió durante una comida de colegas en el Laboratorio Nacional de Los Alamos en 1950. Se dice que Fermi realizó una serie de cálculos para estimar la prevalencia de tecnología similar a la humana en el Universo. Basándose en estos cálculos, llegó a la conclusión de que la Tierra ya debería haber sido visitada por extraterrestres, y se cuenta que preguntó: "¿Dónde están?".

¿Cuántas civilizaciones hay en la Vía Láctea susceptibles de poseer emisiones de radio detectables?

Diez años más tarde, el presidente del instituto SETI (Search for ExtraTerrestrial Intelligence), Frank Drake, llevó un poco más lejos la idea de Fermi con su propia Ecuación (Ecuación de Drake), que pretende estimar la cantidad de civilizaciones en la Via Láctea, susceptibles de poseer emisiones de radio detectables. Aunque con el paso de los años algunas personas han mostrado su disconformidad con la ecuación (conforme avance la tecnología algunos de sus parámetros podrían cambiar, pues a día de hoy es imposible resolverla), sugiere que el número de civilizaciones lo suficientemente cercanas como para que sepamos puede basarse en una combinación de estadísticas.

Soluciones potenciales a la paradoja

Sobreestimamos la prevalencia de vida inteligente en el Universo. Podría haber vida (o no haberla) pero quizá no podríamos contactar con ella al no ser inteligente. Sobreestimamos el deseo de cualquier forma de vida de transmitir voluntariamente información. Podría haber vida inteligente, pero no tendría por qué ser amigable. Quizá hay civilizaciones extremadamente peligrosas ahí fuera, por lo que lo mejor es mantenerse callado, como aquellos que no quieren sobresalir en el patio del colegio frente a los matones. Si es así, nosotros estamos actuando mal enviando nuestras señales. Eso nos lleva a una tercera solución, la hipótesis del zoo. 

La hipótesis del zoo: nos observan sin que lo sepamos. Algunos científicos creen que otras civilizaciones podrían estar observándonos, sin establecer contacto con nosotros, como de igual manera los humanos lo hacemos con otras especies animales. En otras palabras, son tan avanzadas que para ellos somos un simple experimento, igual que los niños que juegan y observan sus hormigueros y peceras. Esto requeriría, sin embargo, una sincronía por parte de otras civilizaciones inteligentes que tendrían que haberse puesto de acuerdo para no contactar con nosotros hasta que estuviésemos 'listos'.

La información está ahí, pero no la entendemos. Quizá se han puesto en contacto con nosotros, pero no hemos sido capaces de 'decodificar' esos mensajes. O quizá, simplemente, no llevamos escuchando el tiempo suficiente.

Están demasiado lejos para escucharnos. Nuestras señales de radio llevan un siglo aproximado emitiéndose, por lo que nuestra presencia solo se detectaría en un radio de unos 100 años luz en torno a la Tierra. O quizá, simplemente, les parecemos irrelevantes.

Somos los primeros. Es demasiado pronto para establecer contacto con otras civilizaciones, en estos momentos somos la única vida inteligente en el Universo con tecnología apropiada para poder hablar con alguien más. Quizá aún no han llegado. Quizá lo han hecho, pero recientemente, y aún no tienen los medios adecuados para contactar con nosotros. Quizá nunca coincidamos. Quizá ya visitaron el planeta. Pero eso fue antes de que nosotros llegáramos.

Estamos solos. No hay nada que hacer, tenemos que asumir que no hay nadie más ahí fuera. Por lo tanto, no existiría la paradoja.

Vivimos en una realidad simulada. Quizá somos la creación de una civilización más avanzada que ha creado una simulación computarizada, y somos individuos con inteligencia artificial. No podríamos saber que vivimos en ella, por lo que solo nos queda continuar, sin conocer nunca las verdaderas respuestas.

FUENTE:

https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2021-01-30/por-que-no-hemos-contactado-nunca-con-extraterrestres_2923108/


miércoles, 17 de mayo de 2023

¿DÓNDE ESTÁN? Una nueva explicación a por qué nunca hemos encontrado extraterrestres

Un investigador ha establecido una nueva hipótesis sobre por qué no escuchamos más que silencio cuando mandamos mensajes desesperados al espacio

Publicado por ACyV

10/05/2023 - 05:00



Hace muchos años (concretamente en los 50), Enrico Fermi se encontraba en una comida de colegas en el Laboratorio Nacional de Los Alamos, cuando realizó una serie de cálculos que pretendían estimar la prevalencia de la tecnología similar a la humana en el Universo. Basándose en ello, llegó a la conclusión de que la Tierra ya debería haber sido visitada por extraterrestres, y se cuenta que preguntó: "¿Dónde están?". 

Diez años más tarde, el presidente del instituto SETI (Search for ExtraTerrestrial Intelligence), Frank Drake, llevó un poco más lejos la idea de Fermi con su propia Ecuación (Ecuación de Drake), que pretende estimar la cantidad de civilizaciones en la Via Láctea, susceptibles de poseer emisiones de radio detectables. La perplejidad de todo el mundo llevó a que trataran de establecerse posibles hipótesis que explicaran por qué aún no nos han visitado los extraterrestres, que iban desde que nos observan sin que lo sepamos, a que no están tecnológicamente avanzados como para contestar a nuestros mensajes o que no hemos coincidido con ellos en tiempo. O, simplemente, sobreestimamos las ganas que tienen de contestarnos.

Grimaldi dice que podrían pasar al menos 60 años antes de que tengamos éxito con una transmisión alienígena. En el escenario menos optimista, habría que esperar más de 2000 años 

Pues bien, como amantes rechazados y obsesionados con la razón por la que pasan de nosotros, hemos seguido estableciendo hipótesis desesperadamente. Ahora, según informa 'Science Alert', un investigador del Laboratorio de Biofísica Estadística de la École Polytechnique Fédérale de Lausanne (EPFL) en Suiza ha encontrado otra explicación para el silencio de la radio, una inspirada en una humilde esponja. 

“Solo hemos estado buscando durante 60 años”, explica el biofísico Claudio Grimaldi. "La Tierra podría estar simplemente en una burbuja que simplemente carece de ondas de radio emitidas por vida extraterrestre". En resumen, hay demasiado espacio para escanear, y lo más probable es que no se crucen en nuestro camino suficientes transmisiones extraterrestres. Eso se basa en un modelo estadístico utilizado anteriormente para estudiar materiales porosos como esponjas, solo que en lugar de poros dentro de un material, se implementó para evaluar la distribución de emisores de señales extraterrestres que pueden, o no, estar en algún lugar del espacio. 

El modelo de investigación comienza con la suposición de que hay al menos una señal electromagnética de origen tecnológico en la Vía Láctea en un momento dado, y que la Tierra ha estado en una burbuja tranquila (o poro de esponja) durante al menos seis décadas, si no más. Si ese es el caso, estadísticamente hay menos de una a cinco emisiones electromagnéticas por siglo en cualquier parte de nuestra galaxia. Para decirlo de otra manera, son tan comunes como las supernovas en la Vía Láctea, por lo que no son muy comunes en absoluto .  

Estadísticamente hay menos de una a cinco emisiones electromagnéticas por siglo en cualquier parte de nuestra galaxia 

En evaluaciones como esta que involucran probabilidad, a menudo hay suposiciones que se pueden manipular. Es posible ajustar los factores para ser un poco más optimistas (o pesimistas), ajustando la probabilidad de captar una señal en el futuro. 

Siguiendo el escenario más optimista, con las condiciones establecidas anteriormente, Grimaldi dice que podrían pasar al menos 60 años antes de que tengamos éxito con una transmisión alienígena. En el escenario menos optimista, habría que esperar más de 2000 años. En ambos casos, necesitaríamos tener un radiotelescopio apuntando en la dirección correcta. 

De cualquier manera, necesitaríamos tener un radiotelescopio apuntando en la dirección correcta 

A medida que los instrumentos que usamos para observar el espacio continúan mejorando, descubrimos más y más planetas que podrían tener las condiciones adecuadas para que exista vida en ellos, y eso significa una mayor probabilidad de que la vida extraterrestre esté tratando de obtener. en contacto. Grimaldi sugiere que la mejor manera de avanzar son las investigaciones comensales: buscar señales en los datos recopilados por telescopios que se enfocan en otras misiones, en lugar de usar telescopios específicamente para buscar comunicaciones extraterrestres.

FUENTE:

https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2023-05-10/nueva-explicacion-cientifica-encontrado-extraterrestres_3625039/?utm_source=facebook&utm_medium=social&utm_campaign=ECDiarioManual&fbclid=IwAR3Dr6oJg4kV8Ws_s0Vv4eqFlpJMsPypkqbBTwIpSw3GEzx_2lkmqMvbhUw